En 1824, Chiapas tomó una de las decisiones más trascendentes de su historia: federarse a México. Un hecho que marcó el destino del estado y definió su identidad dentro de la nación.
Tras un periodo de incertidumbre política y social, la voluntad de los chiapanecos se inclinó por integrarse a la naciente República Mexicana, convirtiéndose en el último territorio en sumarse al pacto federal.
Cada 14 de septiembre, este acontecimiento se recuerda con ceremonias y desfiles, como un homenaje a quienes participaron en aquella decisión histórica que hoy sigue vigente en la memoria colectiva.
Han pasado más de 200 años desde aquel día, la federación de Chiapas a México continúa siendo uno de los pilares que sostiene la historia y la identidad del estado, a pesar de su pobre conmemoración.