En el Cañón del Sumidero habita el crocodylus acutus, mejor conocido como cocodrilo de río o americano.
Los machos llegan a medir hasta seis metros y las hembras hasta cuatro y pesan hasta 500 kilos.
El cocodrilo de río está amenazado por actividades ilegales como la captura y el comercio de su piel.
Aunque no hay un censo, hay una población suficiente en el Cañón y su actividad es monitoreada.
Existen recomendaciones para evitar acercarse, tocarlos, alimentarlos, exponer mascotas o pescar.
En los cocodrilos aplica la ectotermia, condición en algunos animales que no pueden regular su temperatura.
Por eso se quedan inmóviles y con la trompa abierta, para que el aire entre en ellos y se refresquen.
No es que sean falsos.