Una decisión que convierte a estos espacios en el principal pulmón urbano de la capital, donde hoy conviven más de 6 mil 400 árboles.
En Tuxtla Gutiérrez, los parques Caña Hueca, Joyyo Mayu y Tuchtlán fueron declarados Área Natural Protegida bajo la categoría de Centro Ecológico Recreativo. Una decisión que convierte a estos espacios en el principal pulmón urbano de la capital, donde hoy conviven más de 6 mil 400 árboles.
Colectivos ciudadanos celebraron el decreto como un avance en la defensa de los espacios naturales y un acierto técnico frente a la crisis climática. Entre los beneficios, destaca la posibilidad de mejorar la movilidad y la seguridad vial al armonizar normas con la Ley General de Movilidad y el impulso a un modelo de ciudad con más espacios verdes y menos infraestructura invasiva.
Sin embargo, la declaratoria también plantea desafíos, como restricciones para futuras construcciones, un presupuesto permanente para mantenimiento, vigilancia y restauración ecológica. Además de que se necesitará claridad sobre el uso permitido en actividades deportivas, comerciales y recreativas.
Pese a los retos, colectivos aseguran que este logro marca un precedente histórico de incidencia ciudadana en Tuxtla. El siguiente paso, dicen, será continuar la protección del Sabinal, armonizar la normativa local y avanzar hacia una ciudad más humana y sostenible.